El deterioro de la salud mental de la población española era, hasta hace relativamente poco tiempo, solo una percepción. La pandemia y la vivencia de los profesionales sanitarios en sus consultas le daban cierta explicación, pero carecíamos de estudios sociológicos que permitieran afirmarlo de forma certera.
En este contexto, la Fundación Mutua Madrileña, de la mano de la Confederación Salud Mental España, emprendimos hace algo más de un año un ambicioso proyecto para elaborar el primer informe que analiza la situación de la salud mental de la población en nuestro país, el primero que se realiza de esta magnitud y características.
La motivación de la Fundación Mutua Madrileña, en este caso, era ayudar a conocer en profundidad el problema para, a continuación, poner en marcha nuevas líneas de actuación que contribuyesen a mejorarlo y beneficiar, así, a toda la sociedad.
El informe “La situación de la salud mental en España”, que presentamos en 2023 ambas entidades, constata que un 74,7% de la población considera que la salud mental de la sociedad española ha empeorado y arroja luz sobre la relación que tiene ésta con el bienestar. De acuerdo con los datos obtenidos en el estudio, la salud mental obtiene una importancia de 4,5 en una escala de 1 a 5, en su efecto sobre el bienestar general de las personas.
Hay avances, pero falta aún mucho camino por recorrer en la búsqueda de soluciones para mejorar la salud mental y el bienestar de los españoles.
Abordar la problemática relacionada con la salud mental es complejo. Son muchos los factores que influyen y que se tuvieron en cuenta para ofrecer la radiografía que nos habíamos propuesto. Por ello, el estudio contó con un enfoque metodológico mixto, partiendo de una fase cualitativa en la que, a través del discurso de tres grupos de población diferenciados, -personas diagnosticadas con problemas de salud mental, sus familiares y profesionales de la atención primaria y especializada-, se pudieron detectar las circunstancias, necesidades y demandas que, sin duda, debían reflejarse en la encuesta a población general que se realizó posteriormente.
El resultado no solo es una herramienta informativa de gran valor, sino que también pretende ser una llamada a la acción. Es un documento sobre el que debemos reflexionar y tomar decisiones. Hay avances, pero falta aún mucho camino por recorrer en la búsqueda de soluciones para mejorar la salud mental y el bienestar de los españoles.
La Fundación Mutua madrileña, conscientes de que donde mayor deterioro de la salud mental existe es en la población juvenil, hemos iniciado la financiación anual de estudios de investigación médica en esta especialidad. De momento, en nuestra XX Convocatoria Anual de Ayudas a la Investigación en Salud se han seleccionado cuatro trabajos enfocados a profundizar en distintas patologías infanto-juveniles. Con esta doble vía de ayudar a conocer la dimensión del problema y colaborar en la financiación de la búsqueda de soluciones médicas, iniciamos nuestra contribución a mejorar esta situación. En 2024, continuaremos en esta línea y pondremos en marcha nuevos programas de actuación para atender a colectivos especialmente afectados por estos problemas, ya que entendemos que procurar el bienestar y la adecuada salud mental son fundamentales para el futuro de nuestra sociedad.